- Filo: Chardata.
- Clase: Mammalia.
Los miembros de la familia de los perros –perros, lobos, chacales, coyotes y zorros- son descritos colectivamente como cánidos. Se les conoce por su gran resistencia (más que por repentinos arranques de velocidad) y por su comportamiento oportunista y adaptable.
Se caracterizan por poseer una complexión delgada, patas largas y una cola espesa y larga. Los cánidos salvajes viven generalmente en hábitats de pastizales abiertos de todo el mundo, y están ausentes sólo en áreas aisladas, como Madagascar y Nueva Zelanda, donde, no obstante, el perro doméstico se halla presente.
El área de distribución del chacal de lomo negro se encuentra fragmentada en dos poblaciones bien definidas, una de ellas al oeste del África central y la segunda al sur de África. Habita tanto en las sabanas, como en zonas de matorral, bosque abierto y regiones semidesérticas.
Posee un cuerpo muscular de tórax profundo, cubierto con un pelaje marrón rojizo, con un manchón negro característico en forma de montura sobre sus cuartos delanteros y lomo. Las partes ventrales son blanquecinas, y la cola, espesa, es rojiza con el extremo oscuro.
Las extremidades inferiores están desarrolladas para resistir y soportar: algunos de los huesos de las muñecas están fusionados y no pueden girar las piernas delanteras (los huesos de esa zona de las piernas se hallan inmovilizados). Presentan cuatro dígitos en las patas posteriores y 5 en las delanteras, cada uno de ellos con una almohadilla dura.
Las uñas son cortas, no retráctiles y romas. Tienen también mandíbulas largas, caninos largos similares a colmillos (para traspasar las presas) y carniceros bien desarrollados (los dientes cortantes en la parte posterior de las mandíbulas).
Rastrean su presa por el olor, y su hocico, puntiagudo y largo, alberga órganos olfatorios grandes. La audición es igualmente aguda, y las orejas son grandes, erectas y puntiagudas. La vista es menos importante, pero aun así, está bien desarrollada.
Durante la historia, estos animales han demostrado, de muchas formas, ser útiles para la humanidad. Los cánidos salvajes son, por ejemplo, importantes controladores de las poblaciones de roedores, las cuales pueden crecer con mucha rapidez si se dejan sin control. No obstante, a pesar de esto, a muchos de ellos se les considera una plaga.
La hembra y el macho se aparean para vivir y cazar juntos. Es un omnívoro oportunista, que se adapta con facilidad para conseguir el alimento disponible que suponga el mínimo esfuerzo, aunque prefiere cazar que alimentarse de carroña. Suele ingerir una cierta cantidad de alimento extra, que será regurgitado en su cubil para alimentar a los cachorros. Entre sus presas más comunes se encuentran pequeños mamíferos, insectos y reptiles; ocasionalmente incluyen ganado, como ovejas y vacunos jóvenes.
Es precisamente por sus hábitos carroñeros, que suele encontrarse junto a las hienas y buitres en derredor de los festines de los grandes carnívoros africanos, como leones, guepardos y leopardos.
Es de costumbres nocturnas, y durante el día escapa del calor refugiado en su madriguera, bajo un saliente rocoso o bajo los matorrales.
Este mamífero destaca por su astucia y oportunismo. Posee una gran resistencia física, que le permite caminar durante toda la noche si fuera preciso. A pesar de que habitualmente deambula solo, se le ha encontrado en grupos formados por miembros de su misma familia.
Las hembras suelen parir en madrigueras subterráneas abandonadas, que ellas mismas acondicionan con múltiples entradas y salidas de emergencia. Menos frecuentemente usan las cuevas y grietas de las rocas, donde normalmente sólo existe una entrada.
El apareamiento se produce en cualquier momento entre mayo y agosto. La gestación dura aproximadamente 60 días, el tamaño de la camada es en promedio de 4 cachorros (incluso 8), pero por lo general sobreviven entre 1 y 3 de los pequeños. Al cabo de un año, el chacal de lomo negro alcanza la madurez sexual. Ambos padres participan en la crianza y alimentación de los jóvenes. La unidad social por lo general consiste en los dos progenitores con sus crías. La única excepción es cuando grandes manadas de chacales se reúnen para cazar. Los cachorros suelen seguir a los padres a partir de los 3 meses, y son completamente independientes a partir de los 8 meses de edad, cuando abandonan la familia.
Su peso de adulto es de entre 6 y 12 kg, con una longitud de cabeza y cuerpo de 45-90 cm, y una cola de 26-40 cm. Pueden vivir hasta 14 años en cautiverio, pero un máximo de 8 en el medio silvestre.
Se reconocen dos subespecies:
- Canis mesomelas mesomelas, subespecie del sur de África.
- Canis mesomelas schmidti, subespecie del este de África central.
Las águilas son la principal amenaza para los cachorros de esta especie; las águilas bateleur se centran en las crías de hasta 10 semanas, mientras que las grandes águilas marciales, llegan a depredar ejemplares subadultos. Hienas manchadas y chacales dorados también matan a las crías que se encuentran desprotegidas. La principal amenaza para los adultos son los leopardos. Aunque más pequeños que el chacal de flancos rayados, los más agresivos chacales de lomo negro salen victoriosos en los encuentros directos.
La especie no está incluida en los Apéndices de la CITES, ni tampoco gozan de protección legal fuera de las áreas protegidas. Estos chacales han sido mantenidos en cautiverio para su uso en la experimentación con la vacuna antirrábica. Una gran cantidad de investigación, que se centra principalmente en el comportamiento y la ecología de esta especie, se ha llevado a cabo sobre todo en los últimos 25 años. No obstante, en la última década el énfasis se ha desplazado hacia al papel que juega el animal como posible transmisor de la enfermedad de la rabia.
En algunas regiones, el chacal de lomo negro se puede adentrar sin miedo en los núcleos de poblaciones humanas, donde es muy temido como posible portador del virus de la rabia.