- Filo: Chardata.
- Clase: Aves,Accipitriformes.
Los buitres orejudos son los mayores de su género en África, y frecuentan las zonas más secas del noroeste del Sáhara y Eritrea y, en el sur, la provincia de El Cabo. Solitarios o en parejas, anidas en árboles en llanuras con cubierta vegetal mínima. Este buitre prefiere vivir en sabana seca y espinosa, llanuras áridas, desiertos con árboles dispersos y pistas abiertas de montaña. Mientras se alimenta, puede visitar hábitats densos, e incluso zonas habitadas por el hombre, sobre todo si es atraído por animales muertos en las carreteras. Se les puede encontrar desde el nivel del mar hasta los 4.500 m de altitud.
Su aspecto es inconfundible tanto por su gran talla, como sobre todo por su pescuezo desprovisto de plumas y de tintes rosados, que le hacen asemejarse a un pavo. Su cabeza y cuello desnudos son una adaptación que le permite evitar las infecciones producidas por los restos putrefactos.
Su principal característica es su poderoso pico marfileño, más grande y robusto que el de la mayoría de las especies de buitres, y que constituye una adaptación para poder arrancar y perforar la piel y los duros músculos de los animales muertos. A diferencia del resto de los buitres, el torgo puede perforar la piel de las carroñas para alimentarse, siendo las más magras y duras su especialidad, mientras que el resto de las especies, se decantan por las vísceras que son más blandas.
En este sentido su papel ecológico viene a ser similar al del buitre negro en Europa, y suele ser el primero en acceder a las carroñas, abriendo paso al resto de las especies de buitre cuando éste ya ha perforado la piel y facilitado el camino al interior de la carcasa del animal muerto. Su papel por tanto, es de gran importancia, tanto que incluso el resto de las especies de buitre le abren paso para que pueda comenzar a despiezar una carroña.
Se sustentan prácticamente sólo a base de carroña, pero se han documentado casos en que han dado muerte a flamencos adultos y jóvenes. Se cree que todavía cazan colocados sobre una percha elevada, para luego caer sobre su presa, a la que aturden con el impacto y un golpe de sus fuertes picos.
Las «orejas» son carnosas. En general, el buitre orejudo es negruzco por encima, con las plumas de los muslos fuertemente contrastadas de color blanco. Las plumas negras en la parte posterior están salpicadas de coloración marrón. La parte inferior puede ir desde el blanco puro al color de ante marrón. Alcanza una envergadura alar de 3-3,6 m. y una longitud de 114 cm.
Durante el vuelo, estos buitres colocan sus alas grandes y anchas con los bordes delanteros en posición paralela con una ligera inclinación, el aspecto de las puntas de las alas es ligeramente dentado.
Durante el apareamiento, las parejas a menudo construyen un nido, aunque no es extraño que construyan hasta tres, que utilizan alternativamente. Estos nidos son utilizados año tras año. La temporada de cría varía en estas aves dependiendo de la zona en la que habitan. En general, las del este de África crían todo el año, mientras que las del sur se reproducen a partir de mayo hasta mediados de verano. La puesta es habitualmente de 1 huevo, que se incuba durante 54 a 56 días por ambos padres. Aunque se valen por sí mismos a partir de los 125 a 135 días, los pequeños siguen siendo dependientes de sus padres durante bastante tiempo. Suelen tardar hasta 6 años antes de comenzar a reproducirse.
La población mundial se estima en 8.500 ejemplares, de los cuales 8.000 se sitúan África y los 500 restantes corresponderían a la Península Arábiga. Otros estudios afirman que podrían quedar 1.000 parejas reproductoras y unos 3.000 individuos en total en el sur de África.